Mónica Susawa

LAS MIL Y UNA NOCHES


Regreso al rato, o si no te llamo, o te mando un mail, dices mientras buscas tu ropa y me miras con nerviosismo. Lo que no sabes, amado tonto e inolvidable, es que a partir de ahora tu recuerdo y yo tendremos mil y una noches de lujuria desenfrenada.